El Primero de Zenith en dos iniciativas
En 1962, la relojera suiza Zenith se propuso crear el primer cronógrafo…
En 1962, la relojera suiza Zenith se propuso crear el primer cronógrafo automático para conmemorar el centenario de la marca en 1965. Así inicia la celebre historia de El Primero. No obstante, el reto era de tal magnitud que le tomó siete años a la marca, cuatro más de los propuestos inicialmente. Para complicar las cosas, Zenith competía contra la japonesa Seiko y el grupo Chronomatic, compuesto por Hamilton-Buren, Breitling, Heuer y Dubois Depraz.
En enero de 1969, Zenith anuncia su modelo El Primero, tan preciso que, aún en 2012, el austríaco Felix Baumgartner lo seleccionó para saltar desde la estratósfera, en lo que fue el salto en caída libre más largo de la historia. Pese a la aceleración y los cambios de temperatura y presión, este reloj, que se convertiría en una pieza icónica de Zenith, funcionó a la perfección al tocar tierra.
El club Collective agrupa creativos, ejecutivos y fabricantes residentes del área de Silicon Valley. Estos amantes de la alta relojería, en colaboración con la histórica manufactura, han creado para sus miembros una pieza que manifiesta la simplicidad y utilidad tan preciadas en estos días: El Primero C.01.
Por otra parte, Zenith se ha aliado con la casa Phillips para ofrecer otra versión de en platino, con el fin de conmemorar el 50 aniversario de este emblema. En noviembre, la pieza única se subastará a beneficio de Zoe4Life en Ginebra. Esta organización suiza sin ánimo de lucro recauda fondos para la investigación del cáncer infantil, da apoyo financiero a los niños en tratamiento y a las familias necesitadas mientras crea consciencia sobre esta enfermedad.