Situada en el número 143 de Spring Street en una casa diseñada por la firma OMA, la nueva boutique de Jacquemus en Nueva York ofrece la sensación de estar en casa.
Este nuevo espacio de 270 metros cuadrados de Jacquemus no es solo una tienda, sino una experiencia sensorial diseñada para envolver a los visitantes en un ambiente que combina la elegancia minimalista del sur de Francia con detalles industriales propios de la gran ciudad.
La apertura de esta tienda en SoHo, Nueva York, marca la expansión internacional de Simon Porte Jacquemus, quien sigue consolidándose como uno de los diseñadores más influyentes de los últimos tiempos.
Situada en el número 143 de Spring Street, en una casa de finales del siglo XIX diseñada por la firma de arquitectura OMA, la boutique está concebida para ofrecer la sensación de estar en casa. Este concepto, ideado por el propio Jacquemus, busca crear un ambiente cálido y acogedor que, sin embargo, conserva líneas geométricas audaces y modernas.
La tienda es un reflejo de la mezcla entre lo rústico y lo contemporáneo, con suelos de piedra Bourgogne traída de Francia, que recuerdan los patrones de pavimento de los castillos franceses, paredes de estuco blanco y madera clara, además de cortinas amarillas en la zona de probadores que añaden un toque vibrante al espacio.
El diseño no sigue el esquema tradicional de una boutique de lujo. Los visitantes pueden encontrar detalles como barandillas y estanterías de hierro forjado, creadas por un artesano italiano, lo que le da un aire artesanal y exclusivo. Además, el espacio está decorado con una selección de muebles que mezcla piezas diseñadas por OMA, adquisiciones personales de Jacquemus y préstamos de la prestigiosa casa de subastas Christie’s.
Entre las joyas del mobiliario se destacan dos sillas de madera de Frank Lloyd Wright de 1956, una Chaise Croisillon de Jean Royere y una silla de salón creada por Jean Dunand y Bertrand Lacroix, que perteneció a la legendaria diseñadora Madeleine Vionnet.
Estos elementos decorativos se combinan con obras de arte cuidadosamente seleccionadas, como litografías de Aristide Maillol y Joan Miró, un grabado de Pierre Bonnard, y fotografías de Peter Schlesinger y Wolfgang Tillmans. Las esculturas de bronce de Aristide Maillol también forman parte de la decoración, cedidas en préstamo por la Galerie Dina Vierny.
Con esta apertura, Jacquemus no solo refuerza su presencia en Nueva York, sino que añade un capítulo más a la historia de su marca, que ya cuenta con una tienda principal en la prestigiosa Avenue Montaigne en París y otros puntos de venta en lugares icónicos como Galeries Lafayette y el Dubai Mall. Este nuevo espacio en SoHo simboliza una perfecta fusión entre lo clásico y lo moderno, lo artesanal y lo industrial, todo bajo la visión creativa y audaz de Simon Porte Jacquemus.
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