El Rolls-Royce Phantom Scintilla representa la cúspide de la personalización en el mundo automotriz, un tributo a la historia y al legado de la marca británica. Inspirado en la emblemática figura del Espíritu del Éxtasis, este modelo de edición limitada celebra la elegancia, la artesanía y la innovación.
Rolls-Royce Phantom Scintilla: una obra de arte sobre ruedas
Inspirado en la emblemática figura del Espíritu del Éxtasis, cada detalle del Phantom Scintilla ha sido cuidadosamente seleccionado y elaborado a mano por los artesanos más expertos de la marca.
La historia del Phantom Scintilla se remonta a principios del siglo XX, cuando Claude Johnson, director gerente de Rolls-Royce, encargó al escultor Charles Sykes la creación de una figura que representara el espíritu de la marca. Sykes se inspiró en la Victoria de Samotracia, una antigua escultura griega, para dar vida al Espíritu del Éxtasis, una figura femenina alada que desde entonces se ha convertido en el símbolo más reconocido de Rolls-Royce.
Un interior de ensueño
El interior del Phantom Scintilla es una obra de arte en sí mismo. Cada detalle ha sido cuidadosamente seleccionado y elaborado a mano por los artesanos más expertos de la marca. Los asientos, los paneles de las puertas y el tablero están adornados con intrincados bordados que representan la figura del Espíritu del Éxtasis y crean un ambiente de lujo y sofisticación.
Más de 860.000 puntadas han sido necesarias para crear estos impresionantes diseños, que se han realizado utilizando hilos de la más alta calidad y siguiendo patrones geométricos precisos. El resultado es un interior que combina la tradición artesanal con la tecnología más avanzada.
El exterior del Phantom Scintilla es igualmente impresionante. La carrocería, pintada en una combinación de blanco andaluz y azul tracio, evoca el mar Egeo y la pureza del hielo antártico. Esta combinación de colores le confiere al vehículo una elegancia atemporal y una presencia imponente en la carretera.
La figura del Espíritu del Éxtasis, fabricada en una cerámica de grano fino, ha sido colocada en el capó del automóvil. Esta pieza única, creada a partir de un molde original, es una réplica fiel de la escultura original y representa el vínculo entre el pasado y el presente de Rolls-Royce.
El Phantom Scintilla es una edición limitada a solo diez unidades, lo que lo convierte en uno de los automóviles más exclusivos del mundo. Cada uno de estos vehículos ha sido personalizado para satisfacer los gustos y las preferencias de sus propietarios.
Los clientes que han adquirido un Phantom Scintilla han tenido la oportunidad de trabajar estrechamente con los diseñadores de Rolls-Royce para crear un automóvil verdaderamente único. Desde la elección de los colores y los materiales hasta los detalles más pequeños del interior, cada aspecto del vehículo ha sido cuidadosamente considerado.
Símbolo de éxito y prestigio
El Phantom Scintilla es más que un simple automóvil; es un símbolo de éxito, prestigio y buen gusto. Es un vehículo que representa lo mejor de la ingeniería británica y que está destinado a convertirse en una pieza de colección.
Los propietarios de un Phantom Scintilla forman parte de un círculo exclusivo de personas que aprecian la belleza, la artesanía y la exclusividad. Son individuos que buscan lo mejor en todo lo que hacen y que no se conforman con nada menos que la perfección.
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