Wonders: el viaje maravilloso de la colección Otoño Invierno 2024 de Marc Jacobs
La etiqueta de Marc Jacobs cumple 40 años, y el diseñador mismo marcó esta ocasión con un toque de ingenio y su distintivo sentido del humor.
Wonders, la colección Otoño Invierno 2024 de Marc Jacobs, es un viaje lúdico a través de la moda, la percepción y la maravilla. Este año, la etiqueta de Marc Jacobs cumplió 40 años, y el diseñador mismo marcó esta ocasión con un toque de ingenio y su distintivo sentido del humor.
Avanzamos rápidamente hacia el esperado desfile de otoño invierno 2024 de Marc Jacobs en el Park Avenue Armory, y la atmósfera estaba cargada de anticipación. Jacobs siempre ha sido conocido por su espectacularidad, y este evento no fue una excepción.
Al inicio de la pasarela había una mesa plegable colosal y sillas que parecían accesorios de un set de película, pero era una escultura del difunto artista Robert Therrien.
Mientras la audiencia ocupaba sus asientos en la oscuridad, la pasarela se despejó y las luces brillaron, revelando modelos con maquillaje dramático y peinados abullonados.
Se movían como muñecas de papel vivientes, algunas con brazos rígidos, luciendo prendas con proporciones exageradas que parecían estar pegadas a sus cuerpos. Jacobs desafió nuestra percepción de la moda al jugar con la proporcionalidad y exhibir banalidades sartoriales como shorts y chaquetas.
La colección, titulada Wonders (“Maravillas”), fue una desviación de los mayores éxitos de Jacobs explorando los mundos de la percepción y la transformación.
Recordó la década de 1960, reflejando la infancia del diseñador, con atuendos como vestidos con mangas acampanadas, vestidos de lazo a cuadros y versiones sobredimensionadas de los clásicos bolsos Marc Jacobs.
El resultado fue una mezcla de extravagancia y suavidad, incluso cuando las modelos se movían con una gracia rígida.
Vigencia en el tiempo y en la moda
Esta colección fue un testimonio de la creatividad perdurable de Marc Jacobs y su habilidad para cerrar la brecha entre la leyenda de la moda y el niño curioso y rebelde que lleva dentro; fue un momento emocional y seguro de sí mismo para un diseñador.
Aunque Jacobs ha tenido éxito comercial con líneas como Heaven y sus icónicos bolsos tote, sus colecciones de pasarela siguen siendo un lienzo para su creatividad sin filtros.
Estas colecciones alimentan su pasión y lo mantienen siempre curioso e innovador, incluso cuando su destacada carrera incluye hitos como la colección grunge para Perry Ellis en 1993 y la introducción del prêt-à-porter en Louis Vuitton en 1997.
Al concluir el espectáculo, no hubo un final tradicional, pero Marc Jacobs emergió brevemente para un saludo.
Si te pareció interesante esta nota sobre Marc Jacobs, compártela. Puedes leer otros artículos sobre Dior, en nuestras secciones de Design.