Centro Niemeyer: una obra excepcional
Se dice que el arquitecto brasileño Oscar Niemeyer creó los primeros bocetos…
Foto: Centro Niemeyer Facebook Page
Se dice que el arquitecto brasileño Oscar Niemeyer creó los primeros bocetos con un rotulador negro grueso sobre una hoja blanca mostrando, a pocas luces, lo que sería el resultado. Pero, jamás se pensó que la obra final sería tan excepcional, al punto de convertirse en un referente arquitectónico internacional y ser la plaza para la cultura en todas sus formas de expresión.
Foto: Centro Niemeyer Facebook Page
El Centro Niemeyer ubicado en Avilés, España, cuenta con cinco espacios artísticos con diseños de vanguardia: el Auditorio, la Cúpula, una torre llamada el Mirador, el Edificio Polivalente y la Plaza Abierta. De todos esos lugares el más llamativo es el Auditorio, pues a pesar de su considerable altura, posee una compleja forma que puede albergar, aproximadamente, mil personas.
Foto: Centro Niemeyer Facebook Page
Esta magnífica obra comenzó a construirse arduamente en 2008. Sin embargo, en 2010 fue cuando se pudo apreciar la primera fase de la edificación, La Cúpula: un área en forma de esfera que había sido creada exclusivamente para exponer o exhibir obras de arte. Ese mismo año, Niemeyer cumplía 103 años. Un año después, los arquitectos, diseñadores y trabajadores, guiados por el icónico brasileño, lograron terminar el proyecto cultural por completo.
Foto: Centro Niemeyer Facebook Page
Las áreas que destacan en el Edificio Polivalente son: un salón multiuso compuesto por un cine, salas de ensayo, de reuniones y salones para conferencias. Los espacios del Mirador están destinados para disfrutar la gastronomía. Mientras que la Plaza se reservó para momentos de esparcimiento y actividades culturales en las que el público tuviera conexión no solo con el arte, sino con el centro cultural en general.
Esta es la única obra que el brasileño ha realizado en el suelo de España en agradecimiento por haber recibido el Premio Príncipe de Asturias en 1989. En palabras del propio Niemeyer, es “su obra más importante y querida en el exterior de Brasil”.
