Atomix, una estrella Michelin y un premio por diseño
Atomix suena a un ejercito de átomos combinados y colisionando entre sí,…
Atomix suena a un ejercito de átomos combinados y colisionando entre sí, sin embargo, cuando Junghyum Park pensó en el nombre de su restaurante, lo menos que le pasó por la cabeza fueron estas figuras moleculares, sino una palabra proveniente de su país, Corea del Sur.
Por ende, cuando se divide la palabra, Junghyum Park se topó con la partícula “Ato” que en coreano se traduce como un regalo. Una combinación que para una ciudad multicultural como Nueva York es hasta fácil de entender por las distintas comunidades que ahí cohabitan.
Actualmente, este restaurante tiene una estrella Michelin, destacando así en la exclusiva zona de Manhattan brille aun más. No obstante, este mes fue galardonado con otro premio, el que otorga la James Beard Foundation, es un reconocimiento para los restaurantes con un diseño de interiores único, lleno de originalidad y sobre todo con buen gusto para evocar sensaciones a aquellos que vienen a disfrutar de un rico platillo.
Este efecto decorativo es proporcionado por el prestigioso Estudio Writers, el cual escogió a la marca danesa BoConcept para la confección de todos los muebles y diseño mobilario que componen ese todo, generando así una comunión entre lo artístico de cada platillo y lo elevado de cada aspecto empleado para potenciar la imagen del restaurante ubicado en 104 E. 30th St. New York, NY 10016.
BoConcept al llevarse este premio consigue un reconocimiento por los años de trabajo y su labor hospitalaria en la que se ha expandido su paleta de opciones, paseándose por hoteles, residenciales y oficinas. Todos estos lugares reservados del buen gusto. Sin embargo la cocina es uno de sus más grandes enfoques.
Atomix aparece como el campeón en la categoría diseño de restaurantes con menos de 75 sillas. Para lograr el acabado final la firma con sede en Seúl, Studio Writers trabajó codo a codo con la tienda de BoConcept y Madison Avenue, juntos dieron vida a Atomix como una gran obra de arte más que como un simple restaurante.
“Los empleados de BoConcept fueron amables y serviciales en la navegación de sus productos, por lo que fue fácil encontrar las piezas que queríamos”, dijo Ellia Park, copropietaria de Atomix. “Las formas, los acabados y la durabilidad de sus piezas ofrecieron una selección ideal para que brindemos la experiencia de cena integrada que imaginamos”.
Atomix es el segundo restaurante que el joven cocinero tiene la oportunidad de abrir. El primero fue Atoboy en el que la cocina surcoreana predominaba, pero con técnicas culinarias provenientes de Europa, especialmente de Francia.
Junghyum Park inmediatamente acabó sus estudios en ciencias de la cocina en la Universidad Kyung Hee (Seúl) se embarcó en un viaje para ampliar horizontes y así llegar a nuevos puertos que le permitieran aprender más con el objetivo de alcanzar oportunidades que propulsaran su carrera y lo transformara en un chef de reconocimiento.
Por tal motivo, inició su recorrido global en Finlandia, mediante un programa de intercambio, el cual hizo que se adentrara en lo más profundo de la cocina europea. De ahí en adelante tomaría múltiples aviones y trenes en una ruta culinaria que lo llevó a aprender en más de 30 países.