Brunuá: boutique de gastronomía contemporánea
Brunuá gastronomía nace del empeño de sus socios Gustavo Blanco y Ana…
Brunuá gastronomía nace del empeño de sus socios Gustavo Blanco y Ana Corina Arcia, egresados del Instituto Culinario de Caracas, quienes se ocuparon por ofrecer una nueva propuesta en la ciudad de Caracas, afincada en la originalidad, el sabor y la estética. Partiendo de estos tres pilares, los cocineros desarrollan cuatro líneas de trabajo que enumeran un catering, productos Brunuá, cenas o eventos clandestinos y talleres básicos y de alta cocina.
El catering fue la primera parte que tomó vida y está pensado como una opción para eventos muy especiales y reducidos en su número de invitados en los que sus anfitriones se quieran lucir con una oferta gastronómica diferente y llamativa. Gustavo cuenta que los clientes del catering los contactan y reciben, dependiendo del tipo de evento, diferentes propuestas de menús ya diseñados por esta dupla con minucioso cuidado y meticulosidad. ¿Qué puede contener un menú de almuerzo del catering de Brunuá? Pues, inicia con una muestra de sus pasapalos: los tequeños cuadrados que sirven con mermelada de remolacha y pesto de cilantro, sus buñuelos de plátano maduro con relleno de morcilla carupanera y salsa de ají y los mini ponqués de chorizo ahumado. Al momento de sentarse a la mesa los comensales reciben una sopa de arvejas frescas, seguida de su ensalada Kilómetro Cero (una mezcla de remolacha, zanahoria, rúgula, rábano, brotes de mostaza y flores comestibles) servida junto con puré de aguacate y de palmito y con su vinagreta.
El banquete sigue con una vieira cocida a punto sobre una salsa de cocuy y coco y llega a su cumbre con un entrecôte madurado, gratinado con mantequilla de tuétano y papas con aioli de mostaza antigua.
Otra área de la empresa que ya está operativa es la de sus productos, que en principio entregan por delivery pero que pronto distribuirán en diferentes puntos y bodegones de la ciudad. Su lista ofrece platos conocidos y amados por todos, pero preparados a su manera, entre ellos el pastel de chucho, en el que sustituyen la tradicional salsa bechamel por una crema de queso de año y guayanés. El pastel de polvorosa que ellos llaman crumb de polvorosa por su forma de presentar la cubierta como ‘migas’ de la famosa masa quebradiza y dulce y los tequeños que cambian su tradicional forma y pasan a ser cuadrados. También ofrecen risottos listos para calentar como el meloso de olleta de rabo.
Para el segundo semestre de este año prometen extender su oferta con cenas y eventos clandestinos en los que los comensales podrán disfrutar de lo mejor de los sabores de Brunuá y con talleres, que dictarán en su laboratorio en Los Palos Grandes, de cocina básica y de alta cocina.